Líder del mal

Por Melanie Vargas

Muamar Gaddafi…ese nombre hace que las entrañas de muchos en este convulsionado mundo se estremezcan al compás de las balaceras perpetradas por sus seguidores en Libia.

Pero este personaje caricaturesco, igual que muchos dictadores a través de la historia, llegó al poder desde 1969, cuando encabezó un golpe de Estado que puso fin a la monarquía del rey Idris. Hoy, la oposición está tirada a las calles, con arma en mano, exigiendo que Gaddafi se vaya, aunque sea por las malas.

Y es que para nadie es un secreto que el señor es un excéntrico…que si se siente rey usando estrafalarias coronas, sus llamativas túnicas y evidentemente su toque metrosexual, porque a los casi 70 años y que luzca una cabellera negro azabache está un poco extraño.

Y es que la extravagancia llega hasta su sequito de seguridad, la llamada Guardia Amazónica, un grupo de 200 mujeres vírgenes –jajaja…sólo él se lo cree- expertas en artes marciales, en el uso de armas de fuego y todo tipo de combate general –cuidado se vuelven contra él y ahí sí que ni Alá, ni Mahoma resucitado le salvan la tanda.

Calificado frecuentemente como el “Che Guevara árabe”, por su imagen de militar rebelde y sus políticas izquierdistas anticolonialistas y antioccidentales cuando tomó el poder, mantiene relaciones estrechas con los también “socialistas” Hugo Chávez, Evo Morales y Lula da Silva, por lo que su conexión con Latinoamérica ha provocado el descontento entre los promulgadores de la democracia.

Su afinidad política ha sido camaleónica a través de sus más de cuatro décadas en el poder. Abrazó varias corrientes sucesivamente, el panarabismo, el anticomunismo, el pro-sovietismo, el panislamismo, el intervencionismo belicista y un panafricanismo pacifista que lo convirtió en el artífice de la Unión Africana…diay si no es gallo es gallina.

El efecto dominó que se desembocó en Medio Oriente, -que derrocó a Ben Alí en Túnez y a Hosni Bubarak en Egipto- no va a permitir que este seudo-gobernante se salga con la suya.

Lo negativo, el saldo mortal del que se dicen son miles de personas. Y es que como no creerlo si el brutal coronel Gaddafi ha mandado a atacar sin piedad a los que se opongan a su movimiento revolucionario. El siguiente video lo confirma.

No hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista…