miércoles, 2 de febrero de 2011

Globalizados…


Que diferente era la vida cuando nadie nos podíamos localizar. Messenger, Facebook o correos electrónicos estaban exentos a la rutina diaria. Cuando las relaciones eran cara a cara, cuando los amigos eran de carne y hueso, y las conversaciones eran tomándose un cafecito y actualizándose de los últimos acontecimientos de la vida personal.

Recordar cuando se iba a la biblioteca a buscar un libro para hacer una tarea del cole o la U, y las recetas se las pedíamos a la abuela o la mamá y no la “googleabamos”…eso ya es cosa del pasado.

El Internet vino a cambiar la forma de vivir en todos los aspectos posibles…sino tenés Twitter no estás actualizado, si no tenes Facebook no estás a la moda, el Messenger o el Skype es la sala de reuniones de muchos estudiantes-lo digo por experiencia-para hacer tareas, porque por el trabajo y la lejanía, la mejor-y única-opción para realizarlos es una conversación entre todos los compañeros, debatir ideas y sacar conclusiones.

A pesar de la frialdad de la Red, para los que tienen familiares o amistades en el extranjero, es la única oportunidad de poder comunicarse con ellos, mantener una “relación” a pesar de lo cruel que puede ser la distancia y el tiempo, pero hay que aprender a sacarle el mayor provecho.

¿Què más facil que poder comprar por internet?! en muchos casos más barato que el comercio de la esquina, además de que podemos obtener artículos que en Costa Rica sería casi imposible o a precios exorbitantes. Se imaginan cuando nuestro propio refrigerador se encargue de hacer las compras por nosotros? Jajajaja…muchos maridos dejarían de salir en carreras a comprar la leche para el desayuno y así hasta evitar pretextos de porque llegaron tan tarde -ojo señoras…por aquello-.

Que me dicen de los que han tenido la bendición o suerte –por más contradictorio que suene- de encontrar trabajo por esta maravillosa, pero acaparante red? Pues sí, muchos, gracias a las decenas de páginas que hay en el país, han tenido la oportunidad sin salir de su casa de aplicar para un trabajo y de obtenerlo –espero estar dentro de esa estadística muy pronto.

Como un cuchillo de doble filo, Internet no escapa al mal uso de muchas personas que la utilizan solo para afectar la vida de los demàs. Los que viven creando virus para dañar los equipos de muchos, los que suben pornografía –sobre todo la infantil- los que hackean perfiles, roban información, y una innumerable lista de malos usos que solo dolores de cabeza nos provocan a los que si sabemos aprovecharla de manera productiva.

Nadie se escapa a la influencia de Internet. Tendría que ser un ermitaño, escondido en una montaña para que simplemente, la globalización de las comunicaciones le sea indiferente.

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